Páginas

sábado, 13 de diciembre de 2014

LA MONARQUIA Y LA NOBLEZA FEUDAL
Tras la caída del Imperio carolingio, Europa quedó dividida en un conjunto de reinos, condados y principados que tenían en común el cristianismo y la organización feudal.




 UNA MONARQUIA DE DERECHO DIVINO

Se situaba el monarca, que era reconocido como el primus  inter pares, es decir, el primero entre iguales (nobles).La iglesia cristiana estableció que los monarcas eran los representantes de Dios en la tierra, con la misión de gobernar a su pueblo y defender su reino. Los monarcas no tenían residencia fija, poseían diversos castillos.

LA CONCEPCIÓN PATRIMONIAL DEL REINO
Los territorios que el monarca tenía bajo su autoridad componían su reino y eran considerados como su patrimonio personal. A veces n noble se hacía vasallo de otro rey y sus tierras se integraban en otro reino y el monarca dividía su reino entre sus tierras se integraban en otro reino y el monarca dividía su reino entre sus herederos y las fronteras cambiaban fácilmente


LOS PODERES REALES
El monarca compartía el gobierno del reino con la gran nobleza (condes, duques, marqueses) y las principales autoridades religiosas (obispos y abades).
Tenían atribuciones exclusivas:
1.       Dirigir campañas militares, acudían con los vasallos con sus ejércitos para no ser considerados traidores y perder sus feudos.
2.       Recaudar impuestos para guerras, coronaciones, etc.
3.       Ejercer de juez supremos en pleitos.

LA CURIA Y LA CORTE Real
Para gobernar el rey contaba con la ayuda de la Curia, formada por obispos, abades, condes, duques o marqueses. Junto al rey estaban siempre la familia, amigos y consejeros.


LA NOBLEZA GUERRERA
La guerra era la principal actividad de los nobles y el rey. Eran los únicos que portaban armas.

LOS CABALLEROS
Se dedicaban al oficio de armas. A los hijos de los nobles se les educaba para la guerra. Primero eran pajes, y después escuderos y a los 18 años se les armaba caballeros



GUERRA Y TORNEOS
Los nobles luchaban para defender territorios, enfrentarse a otros nobles y/o ayudar al monarca o al señor que obedecían. La guerra proporcionaba tierras y riquezas. Los torneos los hacían para divertirse y entrenarse en época de paz.


 La mujer noble
Pese a pertenecer a un estamento privilegiado, la mujer noble no contaba con grandes derechos en la Edad Media. Su principal función consistía en casarse y proporcionar descendencia que garantizase la supervivencia del linaje. Los matrimonios eran concertados, pues el valor de una mujer estaba relacionado con la dote que aportase al casamiento, ya que cuando se casaba sus tierras pasaban a engrosar el patrimonio del marido. Una vez casada, residía en el castillo, donde su vida quedaba consagrada al cuidado de los hijos y a la administración de la economía doméstica. Solo en caso de ausencia del marido, la mujer se veía en situación de dirigir la defensa del castillo. En líneas generales, la formación cultural de la mujer nobiliaria era superior a la del hombre, pues mientras este se preparaba para la guerra, ella se dedicaba a leer y a escribir, y era frecuente que las mujeres supiesen latín y lenguas extranjeras. También era frecuente que las mujeres acogieran en el castillo a trovadores y juglares, lo que contribuyó a extender por Europa el gusto por la poesía y la música. La figura de la mujer quedó condicionada por el ideal caballeresco transmitido por los romances y los cantares de gesta de la época, por el que se consideraba que uno de los principales deberes de un buen caballero era cortejar y servir a su dama.









No hay comentarios:

Publicar un comentario